Impotencia. Los argentinos estamos acostumbrados, lamentablemente, a sentir eso. Hoy tuve una vivencia, se me presentó cara a cara, y se me rio. Estruendosamente, resonaban carcajadas. Burla, humillación. Eso sentí cuando me encontré sumergida en las páginas de nuestra Constitución Nacional.
No es que haya venido fallada, ni nada por el estilo. Más bien, es algo así como un texto sagrado, digno de ser aplicado. En cualquier lugar, menos acá. Sentí que tenía una pequeña utopía entre mis manos.
Desearía que esta experiencia no me hubiera llevado a hacer comparaciones, a ver cuánto se aplicaba en la realidad, pero el hecho es que nos cagamos en la constitución.
Art. 14.- "Todos los habitantes de la Nación gozan de los siguientes derechos conforme a las leyes que reglamenten su ejercicio; a saber: de
trabajar y ejercer toda industria lícita; de navegar y comerciar; de peticionar a las autoridades; de entrar, permanecer, transitar y salir del territorio argentino; de
publicar sus ideas por la prensa sin censura previa; de usar y disponer de su propiedad; de asociarse con fines útiles; de profesar libremente su culto;
de enseñar y aprender."
Para completar, el
14 bis es igual de gracioso.
Sigo..
Art. 15.- "En la Nación Argentina
no hay esclavos (...)"
¿No son acaso las maneras actuales de "trabajo" distintas formas que adopta la esclavitud? No tener dueño con nombre y apellido no implica carecer de precio.
Art. 16.- "La Nación Argentina
no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento: no hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales ante la ley, y
admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad. La igualdad es la base del impuesto y de las cargas públicas."
Es absurdo hablar de igualdad en este contexto. ¿Qué implica ser igual ante la ley? ¿Todos tenemos la papota para acudir a un buen abogado? Por favor... Con las prerrogativas de sangre convivimos a diario, ¿no alcanza acaso con ser "hijo de..", "amigo de.."?
Sería pseudo kamikaze seguir enumerando, así que me retiro sin antes dejarles una de las más cómicas:
Art. 38.-: "(...)Los partidos políticos deberán dar
publicidad del origen y destino de sus fondos y patrimonio."